Limpiar el colchón es un tema que va más allá de la limpieza en sí, ya que se trata de una cuestión de salud.

Los colchones acumulan millones de seres microscópicos ocultos en su superficie llamados ácaros. Estos son pequeñísimos organismos que se alimentan de piel muerta. Estos ácaros se alojan en colchones, almohadas, cojines y otros tapizados y textiles, generando alergias, problemas cutáneos y respiratorios.

• ¿Cada cuánto tiempo debemos limpiar el colchón?

Lo recomendable es limpiar el colchón cada seis meses, coincidiendo con el cambio de temporada. En ese momento se debe aprovechar también para darle la vuelta, ya que la mayoría de colchones tienen un lado de verano y otro de invierno.

• Los mejores productos para limpiar el colchón

Aunque los supermercados están repletos de productos específicos para quitar manchas, no es recomendable el uso de los mismos debido al contacto que tendremos con ellos, ya que las sustancias químicas que los componen podrían suponer un riesgo para  nuestra salud.

A cambio, existen productos naturales e inocuos que han demostrado una gran eficacia para limpiar los colchones. A continuación hablaremos de los más efectivos para quitar cada tipo de mancha:

       – Agua y limón: uno de los más utilizados es la mezcla de agua y limón, que resulta ideal para limpiar manchas como orina, sudor o vómito. Resulta muy sencilla su preparación, así como su aplicación.

        – Bicarbonato: es un producto que puede resultar muy útil para la limpieza de nuestro colchón. Permite eliminar la humedad, desodorizar y eliminar diversos tipos de bacterias y los molestos ácaros. Es muy económico y eficaz, por lo que resulta una apuesta segura.

        – Vinagre blanco: es uno de los productos más efectivos para limpiar el colchón. Es especialmente eficaz contra manchas de orina y sudor.

       – Agua oxigenada: ideal para deshacerse de una de las manchas más complicadas de eliminar: la sangre seca.

Si, tras probar con los productos naturales que hemos comentado no consigues los resultados que esperabas, también puedes recurrir al uso de detergentes. Es mejor emplear detergente líquido que en polvo.

• Cómo realizar la limpieza del colchón

 1º. Limpiar las manchas visibles del colchón.

Antes de quitar los malos olores y limpiar el colchón a fondo, lo primero que hay  que hacer es limpiar las manchas visibles. Para ello se deben seguir los siguientes pasos:

1. Mezclar medio litro de agua fría y tres cucharadas de detergente líquido, que verteremos en el agua haciendo bastante espuma.
2. En la zona donde se encuentre la mancha, con ayuda de la esponja, esparcimos la espuma.
3. Frotar con movimientos circulares hasta observar que la mancha vaya desapareciendo. Hay que intentar no mojar mucho el colchón. Para ello, una vez usada la espuma, se debe retirar la espuma y secar.

2º. Desinfectar y eliminar los ácaros.

Una vez tratadas todas las manchas y que el colchón se haya secado, se procede a desinfectarlo y eliminar los ácaros. Para ello, se debe realizar el siguiente procedimiento:

1. Esparciremos sobre todo el colchón el bicarbonato de sodio, para ello podemos utilizar un tamizador.
2. Seguidamente, verteremos en un pulverizador o atomizador vinagre blanco o  agua oxigenada, (si existiesen manchas que lo requirieran), para rociar de manera uniforme sobre todo el colchón.  Dejar reposar unos 45 minutos.
3. Trascurrido este tiempo, rociar con el pulverizador las zonas que  deberemos frotar con la esponja limpia. Hay que hacerlo sistemáticamente hasta que hayamos frotado todo el colchón. Observaremos cómo el bicarbonato de sodio se pone marrón y esto significará que está arrancando la suciedad.
4. Posteriormente, se deben aspirar los restos del bicarbonato. Tras este proceso, lo ideal sería dejarlo una hora al sol. Sin embargo, si no es posible y está húmedo, se puede secar con el secador.

3º. Si los olores son muy profundos y persistentes, es recomendable espolvorear el bicarbonato, podemos cubrirlo con un plástico y dejarlo actuar toda la noche. A la mañana siguiente, aspirar y rociar con un poco de desinfectante.