El comercio de segunda mano está cada día más en auge ya que nos permite adquirir productos a un precio más asequible, estando, en muchas ocasiones, en muy buenas condiciones. Por ello, consideramos conveniente detallar cuáles son nuestros derechos y garantías cuando adquirimos este tipo de productos.
Lo primero que debemos saber, es que la garantía no es igual cuando compramos a un particular que cuando lo hacemos a una empresa.
Garantías.
En cuanto a las compras de segunda mano a particulares, no se encuentran dentro del ámbito de aplicación de la normativa en materia de protección al consumidor. Sin embargo, sí que cuentan con garantía. Según nuestro Código Civil, el vendedor responde por los vicios ocultos durante seis meses desde la entrega del bien. Pero cabe destacar, que no lo va a hacer por aquellos defectos que estuviesen a la vista. Además, en el caso de tener que reclamar, únicamente podrá acudir a la vía judicial para hacer valer sus derechos.
Sin embargo, cuando se trata de compras de segunda mano de un particular a una empresa, contamos con mayores garantías puesto que la actual normativa establece que, para todas aquellas compras realizadas a partir del 1 de enero de 2022, la garantía será de tres años desde la entrega en el caso de bienes, o de dos años en el caso de contenidos o servicios digitales. Si la compra se ha realizado antes de esta fecha, la garantía será de dos años. Para bienes de segunda mano, la ley establece que se puede pactar un plazo inferior que en ningún caso será de menos de un año desde la entrega.
En la práctica, lo habitual es que la garantía que se pacte cuando adquirimos un bien de segunda mano a una empresa sea de un año.
¿Cuáles son nuestros derechos cuando compramos un bien de segunda mano a una empresa?
En el caso de que el bien tuviese algún defecto o no fuese conforme a contrato, contamos con la posibilidad de solicitar su reparación, una rebaja en el precio o incluso la devolución del producto, es decir, solicitar la resolución del contrato.
Sin embargo, a diferencia de cuando compramos artículos nuevos, en las compras de segunda mano no podremos exigir la sustitución del producto.
Además, si la compra de segunda mano la realizamos fuera de un establecimiento mercantil, disponemos también de catorce días naturales para desistir del contrato sin tener que alegar causa alguna.
En cuanto a las tiendas de segunda mano, estas deben cumplir una serie de requisitos, como son tener los productos correctamente etiquetados, mostrar el precio final de los artículos con impuestos incluidos, y entregar tique o factura de compra. Además, también deben tener hojas de reclamaciones y ponerlas a disposición del consumidor si se la solicitan.
¿Y si tenemos que poner una reclamación?
Para el caso en que tuviésemos que realizar una reclamación, podemos hacerlo en los organismos de consumo o reclamar directamente al vendedor, siempre de manera que quede constancia de ello.
Cuando realizamos compras a través de internet, a veces nos encontramos con que la empresa no se encuentra ubicada en territorio español. Para reclamar en estos casos, siempre que esté en un país de la Unión Europea, podemos hacerlo a través del Centro Europeo del Consumidor.
Algunos consejos de valor.
Es importante saber si el producto que estamos comprando, lo hacemos a un particular o a una empresa puesto que, tal y como hemos explicado, el plazo de garantía es diferente.
Debemos solicitar siempre un justificante de pago. Además, si el producto se encuentra dentro del plazo de garantía legal, debemos solicitar también la factura o tique de compra.
No olvides guardar cualquier tipo de documentación referente a la compra, como pueda ser publicidad del producto, correos electrónicos, etc., ya que la publicidad es vinculante y podemos exigir su cumplimiento.
Si es posible, intenta comprobar el estado del producto y su funcionamiento antes de su adquisición.
Cuando compramos a través de internet, debemos tener especial cuidado con posibles fraudes. Intente verificar la identidad del vendedor y las opiniones que dan los usuarios de él. Además, es conveniente solicitar toda la información posible sobre el bien a adquirir y procurar usar un método de pago seguro. También es importante informarnos sobre quién paga los gastos de envío de la devolución en caso de ser necesario.