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Los influencers están obligados a garantizar el derecho de rectificación a los ciudadanos.
Todo contenido publicitario debe estar etiquetado según su idoneidad por edades.
La publicidad ha encontrado nuevos caminos para llegar a los consumidores a través de plataformas online y creadores de contenido, conocidos como influencers. Estas figuras tienen la capacidad de moldear opiniones, decisiones de compra y comportamientos gracias a su autoridad y relación cercana con sus audiencias. Sin embargo, el impacto de estas estrategias publicitarias en los derechos de los consumidores ha motivado nuevas normativas, como el anteproyecto de ley del Derecho de Rectificación , que amplía su aplicación a los medios digitales e influencers, reforzando la protección de los usuarios frente a posibles. abusos o inexactitudes.
El rol de los influencers y la publicidad digital
Un influencer está definido como una persona capaz de captar la atención de un nicho específico y afectar las decisiones de su audiencia. Su influencia no solo radica en su alcance, sino también en la confianza que generan. Esto los convierte en piezas claves de las estrategias publicitarias y de marketing en la actualidad.
La creciente relevancia de los creadores de contenido en redes sociales ha llevado al desarrollo de regulaciones específicas. La Ley General de Comunicación Audiovisual y el Real Decreto 444/2024 establecen que aquellos creadores con más de 100.000 seguidores en una red social, o 200.000 en varias plataformas, deben cumplir con normativas similares a las de los medios audiovisuales tradicionales.
Regulaciones para publicidad en medios digitales
Entre las obligaciones más importantes para los influencers, destacan las siguientes:
- Prohibición de publicidad de productos y servicios específicos:
- No se permite la promoción de tabaco, cigarrillos electrónicos, medicamentos, ni productos sanitarios que no cumplan con las normativas específicas.
- La publicidad de juegos de azar y apuestas está restringida a franjas horarias específicas (de 1:00 a 5:00 de la madrugada) y prohibida en contenidos dirigidos a menores.
- Regulación de la publicidad de alcohol:
- La promoción de bebidas con más de 20 grados de alcohol está prohibida fuera de la franja horaria de 1:00 a 5:00. Las bebidas con menor graduación alcohólica pueden promocionarse entre las 20:30 y las 5:00, siempre que no se asocien al éxito social ni fomenten un consumo excesivo.
- Protección a menores de edad:
- Todo contenido publicitario debe estar etiquetado según su idoneidad por edades, garantizando que no se dirija de manera explícita a menores.
- Inscripción en el registro estatal:
- Los influencers que cumplan con los criterios establecidos deben registrarse en el «Registro estatal de prestadores del servicio de comunicación audiovisual», garantizando transparencia y rendición de cuentas.
Derecho de rectificación
Se ha aprobado el anteproyecto de ley del derecho de rectificación amplía la protección de los ciudadanos frente a noticias falsas, bulos e inexactitudes propagadas en medios digitales e influencers. Este avance reconoce el poder que tienen algunos creadores de contenido, cuya capacidad de difusión puede superar los medios tradicionales.
Por primera vez, los influencers con audiencias significativas están obligados a garantizar el derecho de rectificación a los ciudadanos. Esto implica que cualquier persona afectada por información inexacta o falsa propagada por estos creadores podrá solicitar una corrección pública.
¿Cómo reclamar y ejercer el derecho de rectificación?
El derecho de rectificación permite a personas físicas, jurídicas, familiares de personas fallecidas o personas con discapacidad afectadas por información falsa o inexacta, solicitar una corrección dentro de los 10 días naturales posteriores a la publicación. La solicitud debe dirigirse al medio o influencer responsable, incluir el texto de la rectificación de manera clara y objetiva, y evitar opiniones personales salvo que sean esenciales para el contexto. La rectificación debe publicarse en un lugar visible, con relevancia similar al contenido original, en un plazo máximo de 3 días hábiles, y en todas las plataformas donde se difundió la información. Los medios digitales e influencers están obligados a contar con mecanismos accesibles para recibir y gestionar estas solicitudes. Esto garantiza mayor responsabilidad, transparencia y protección para los ciudadanos en el entorno digital.
Si la rectificación no es publicada el afectado puede presentar una demanda judicial breve, sin necesidad de abogado ni procurador, ante el tribunal competente en un plazo de 7 días hábiles.
Impacto en los derechos del consumidor
La regulación de la publicidad digital busca equilibrar los intereses de los anunciantes con los derechos de los consumidores. Entre los principales beneficios para los usuarios destacan:
- Mayor transparencia: Al homologar a los influencers con los medios tradicionales, se fomenta una publicidad más clara y veraz.
- Protección a colectivos vulnerables: Las restricciones en la promoción de productos como alcohol, tabaco o juegos de azar buscan salvarguardar especialmente a los menores de edad.
- Garantía de información veraz: El derecho de rectificación otorga a los usuarios una herramienta para combatir las noticias falsas, promoviendo un ecosistema digital más ético.
Precauciones para los consumidores
A pesar de estas regulaciones, los consumidores deben mantener una actitud crítica frente a la publicidad digital. Algunas recomendaciones que podrían ser interesantes a tener en cuenta:
- Verificar fuentes: Antes de confiar en la promoción de un producto o servicio, se debe investigar la reputación del influencer y del anunciante.
- Reconocer contenido publicitario: Es importante identificar cuándo una publicación está patrocinada y entender que los intereses comerciales pueden influir en el mensaje.
- Reportar irregularidades: Los usuarios pueden recurrir a las autoridades competentes en caso de publicidad engañosa o violaciones a las normativas.
La publicidad en medios digitales e influencers tiene un impacto significativo en el comportamiento del consumidor, lo que ha llevado a la necesidad de regulaciones más estrictas. Sin embargo, la responsabilidad también recae en los consumidores, quienes deben adoptar un enfoque informado y crítico ante las estrategias publicitarias digitales.